Viejo pervertido masturbando el coño de una obesa
Dejo de salir de su casa ese día que empezó a creer que ya su vida se acaba sino bajaba de peso, pero luego de mucho dinero en la basura y tiempo perdido, se da cuenta que si tiene que morir, es porque todos mueren. Ese día ya se dedica a abrir las piernas para gozar. Y hay un viejo pervertido que adora estar metido en su casa masturbando su coño. A veces se le pone la polla dura y ella aprovecha para chupársela y luego que le dé una follada. Es una cuestión de perspectiva, ella bajo sus expectativas y ahora pasa muchas al día follando sin tener que dejar de comer.