Un negro hace que la rubia se venga a cuatro patas
Su novio es el capitán del equipo de baloncesto y parece que será el rey del baile este verano, todo apunta a que tendrá un futuro espectacular porque también es muy listo y todas las demás zorras quieren con él. Para ellas es genial, pero… hay algo que no termina de calarle. ¡Es que no es negro! Y ella no quiere decirlo y mucho menos admitirlo en público, pero lo que más le gusta es tener a un hombre de color que haga que ella se venga a cuatro patas con una buena follada interracial. Una rubia tiene derecho a querer una polla negra sin que nadie la llame racista, es lo justo.