Se sienta en el sofá y su hijo le mete la polla en la boca
Todas las tardes, luego que el sol se oculta, ya la cena esta lista y ella espera paciente a su pequeño llegue de la universidad y pueda disfrutar la comida que le hace su madre. Entiende que cuando ella no este, serán las cosas que le recordara: cualquier comida que desprenda un olor similar, lo hará pensar en ella. Luego que ha comido, se sienta sobre el sofá y su hijo se acerca a ella y le mete la polla en la boca. Ella le hace una mamada con mucho amor y paciencia hasta que el joven se puede correr y luego, juntos se van a la cama con la esperanza de ver el sol un nuevo día.