Se come la polla de un negro que le daba un masaje
Las piernas entumecidas y esa dificultad para agacharse la llevaron a buscar ayuda. A pesar que su madre le dijo que un médico era lo mejor, ella opta por algo más simple y tradicional. Es que está convencida que el alma y esas cosas se pueden alinear con aceites y de esa forma el cuerpo se repara. Ya sea que se pueda entender o no, lo que hace es que va donde un hombre negro para que le dé un masaje y luego se come su polla. Le hace una mamada para que se le ponga dura y luego hace que se la meta dentro del coño. Tal vez solo tenía ganas de follar no más.