Me has dejado todo el culo bañado de semen
Su marido sale a trabajar y pocas horas después, ella está reclamando a su cuñado: —Me has dejado todo el culo bañado de semen—, mientras suspira fuertemente y tiene las piernas abiertas. —Ahora tendré que ducharme otra vez para quitarme el olor de tu polla y que tu hermano no se entere que me has dado una follada anal—, sigue diciendo con una sonrisa de puta en la cara. Es que la negra necesita hacer su drama para fingir que se trata de otra cosa y no, que ella abre las piernas para que le den placer a su coño y comete el pecado de la infidelidad. Es normal en las zorras.