La mesonera gana propina montando un cliente
El mundo es diferente, ya cambio y lo más increíble de todo es que puedes ser muy joven y tampoco te darás cuenta. Es un ritmo que ningún humano puede asimilar pero es lo que esta pasando y luego, después de muchos años, se podrá hablar con base y serenidad al respecto. Pero lo mejor es que una mesonera puede ganar propina extra montando a un cliente. Es el fetiche perfecto de todo hombre. Una mujer que amablemente te sirva la comida y luego de comer, la puedes llevar a un hotel para follarla sin tener que saber su nombre. Gozas su coño y luego te vas.