Follando con amor el coño de su madre
Recordar esos días cuando regresaba del colegio y en la cocina, ya se sentía el olor a la comida que ella le hacía, le hace sentir bien. Es una especie de recuerdo que usa para cuando las cosas van mal, le sirve para recordar que era feliz y no supo que lo era hasta ahora. Esos días siguen pasando, aún vive con su madre a quien con mucho amor, siempre visita en su alcoba para darle una follada a su coño. La vieja solo lo tiene a él y lo más justo, es que el chaval use su polla para darle a la madura los mismos recuerdos que ella en su momento pudo forjar en él y que ahora le ayudan tanto.