El fisgón por fin puede follar con la vecina puta
Ella siempre supo que él estaba ahí, prácticamente la ponía un poco caliente el hecho de saber que alguien la estaba viendo, un admirador oculto es algo que ninguna mujer desprecia, además es una carta bajo la manga a la hora de necesitar un macho con carácter de urgencia. Que fue lo que paso, porque le dieron ganas de follar y al fin el fisgón pudo follar con la vecina puta. Ya no eran hombres desconocidos que entraban a meterle la polla a la zorra, ahora era él quien la estaba follando y saciando todas las ganas que desde hace mucho le tiene.