El amigo de su hermano se corre sobre sus tetas
Algo suena arriba, posiblemente sea el viento que mueve las viejas tablas de la casa o alguna de las mascotas que intenta divertirse con alguna prenda de alguno de los que viven ahí. Solo que ella necesita confirmar de que se trata con sus propios ojos. “¿Cómo estás?”, le pregunta al amigo de su hermano que descansaba en la alcoba esperándolo. Solo que ella no lo iba a dejar que se aburriera en su espera y rápidamente salta sobre él para hacerle una mamada de polla y luego que la tenía dura, abre las piernas para que le dé una follada. Al finalizar, le apetecía que él se corriera sobre sus tetas.