con el servicio de habitaciones una puta de regalo
Si me dijeran que cerrara los ojos y que deseara con fuerza un deseo para que se me concediera desearía poder estar en un lugar como en el de este vídeo, pegándome un bañito en la piscina, con buena temperatura y sol y que al salir y antes de almorzar me esperara una joven y guapa puta de la isla para servirme en todas mis necesidades sexuales. Mientras tanto, vuelvo al trabajo, a mirar por la ventana como llueve y a esperar que se pase el invierno.